Lola Sepúlveda
Rebelión
En los últimos años del gobierno del Presidente mexicano Ernesto Zedillo,
Arely Madrid Tovilla fue Secretaria de Gobierno en Chiapas con el "sustituto
del sustituto", Roberto Albores Guillén. El gobernador Albores, que había sustituido
al gobernador Ruiz Ferro, quién a su vez había sustituido al gobernador Robledo
Rincón, tuvo entre sus obsesiones de gobierno el acabar con los Municipios Autónomos
zapatistas empleando para ello tanto la "fuerza de la ley", cuyos ejemplos más
relevantes fueron los operativos militares y policiacos en San Juan de la Libertad,
municipio de El Bosque, o Taniperla, y acciones pretendidamente políticas, como
una Ley de Remunicipalización de base contrainsurgente, o una Ley de Amnistía
que sólo favorecía a los grupos paramilitares a los cuales apoyó hasta el último
momento de su mandato.
Por su parte, la Comisión de Concordia y Pacificación, más conocida bajo sus
siglas "COCOPA", nació a finales del mes de febrero de 1995, según propuesta
de Ernesto Zedillo quién, pocas semanas antes, había traicionado a los zapatistas
con quienes estaba manteniendo una negociación orientada, según él, a conseguir
la paz en Chiapas, lanzando contra ellos al Ejército Federal y cursando ordenes
de detención contra sus principales dirigentes.
Fallida la acción militar que no consiguió detener a la Comandancia del EZLN,
Zedillo dio inicio a una etapa en que combinó una pretendida apuesta por la
paz junto con una dura y real guerra de baja intensidad en toda la zona. Y en
este marco, el Congreso y Senado mexicanos emitieron una "Ley de Concordia y
Pacificación" que, además de dejar en suspenso las órdenes de detención emitidas,
creó la COCOPA, que integrada por senadores y congresistas, tenía como fin ayudar
en la búsqueda de una solución de paz en Chiapas.
No sin ciertos problemas al principio, los componentes de la primera COCOPA
se creyeron su papel, y cumplieron con lo que de ellos se esperaba. Mientras
los gobiernos federal y estatal negaban la existencia de los grupos paramilitares
que proliferaban bajo su amparo y el de la guerra de baja intensidad que propiciaban,
la COCOPA trabajó para allanar caminos en los encuentros previos a las Mesas
de Diálogo de San Andrés, estuvo presente y ayudó a organizar esas mismas mesas,
así como Foros y Encuentros. En su trabajo para conseguir la paz en Chiapas,
elaboraron la llamada "Ley Cocopa", propuesta legislativa para dar cumplimiento
a los Acuerdos de San Andrés lo que, hasta la fecha, no ha ocurrido.
Desde 1994 a la fecha, se han producido dos elecciones mediante las cuales se
han renovado parte de las Cámaras legislativas mexicanas, y por lo mismo, los
miembros de la Comisión han cambiado en dos ocasiones, siendo la actual, la
"tercera" COCOPA. A las dos últimas, además, les ha tocado realizar su labor
en unos momentos en los que las relaciones entre el EZLN y el Gobierno no han
existido prácticamente, por lo cual, la Comisión ha llevado una vida más bien
pobre, no sabiendo muy bien cómo enfrentar en su conjunto, la inmensa tarea
de ayuda a la paz que tienen por delante.
Arely Madrid Tovilla es, ahora, senadora por el Partido de la Revolución Institucional
(PRI) y fue designada por este como miembro de la Comisión de Concordia y Pacificación,
cuya presidencia se ejerce de forma rotatoria entre sus miembros. En estos momentos,
es su Presidenta.
Una de las primeras acciones que realizó la senadora Madrid Tovilla, al asumir
dicha presidencia, fue viajar a la zona norte de Chiapas y reunirse allí con
los ganaderos de Tila y Sabanilla y con los dirigentes del grupo paramilitar
Paz y Justicia. La pregunta es: ¿en busca de un camino de paz?
Ahora, ante la creación de las Juntas de Buen Gobierno zapatistas, ha llamado
tanto al gobierno federal como al estatal "para que intervengan y generen las
condiciones de desarrollo y seguridad en la zona", advirtiendo, además, que
si el gobierno federal piensa que el conflicto le corresponde sólo a Chiapas,
está en un error: "El país se puede empezar a pintar de otro color si no se
actúa con la responsabilidad que se requiere", ha advertido.
La senadora y actual presidenta de la Comisión de Concordia y Pacificación,
ha declarado que la creación de las juntas de Buen Gobierno "genera un ambiente
de confrontación" y que "hay una enorme molestia por la creación de juntas de
Buen Gobierno y la declaración de zonas autónomas, ante la complacencia del
gobierno estatal". Y en su misión de ayuda a la paz, ha pedido paciencia a los
miembros del grupo paramilitar Paz y Justicia, los mismos a los apoyó sin reservas
el gobierno en que ella participó.
Y mientras, dos indígenas, bases de apoyo del EZLN, secuestrados hace ya varios
días por la Central Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos (CIOAC -
oficial) en el municipio de Las Margaritas, siguen sin aparecer. Esta Central,
cuyos miembros pertenecen al Partido de la Revolución Democrática (PRD), se
han juntado con las organizaciones ganaderas de Tila, Ocosingo, Altamirano,
Comitán y Las Margaritas y están desarrollando una campaña de hostilidad que,
en el caso de la CIOAC, ya ha pasado a los hechos.
En una agresiva campaña contra los Municipios Autónomos, que recuerda demasiado,
a aquellas que desarrollo el gobierno estatal en el que participo Arely Madrid
Tovilla, esta senadora ha declarado que "la creación de las juntas de Buen Gobierno
por parte del EZLN ha generado un ambiente de provocación permanente, al grado
de que en días pasados un grupo de zapatistas mantuvo secuestrados a 35 militares
durante nueve horas en el municipio de Chenalhó". Sin embargo, el secuestro
del grupo de militares en Santa Martha, Chenalhó, acusados de destrozar el camino
que lleva a la ciudad, no fue realizado por indígenas zapatistas y es extraño
que la senadora desconozca el dato.
Si esta es la ayuda que la actual presidenta de la COCOPA puede gestionar para
conseguir la paz en Chiapas, habrá que reconsiderar si realmente esa Comisión
cumple como una instancia de "ayuda" o "coadyuvancia"