Mientras la credibilidad del gobierno de EE.UU. se pierde a hilachas por todos
lados, la ex congresista por Georgia, Cynthia McKinney, que ahora ha sido totalmente
vindicada por sus abiertas preguntas sobre la información del gobierno
respecto al 11-S, hace notar su presencia en todo EE.UU
Cynthia McKinney:
"La democracia está bajo ataque - recuperémosla"
Michael C. Ruppert
From The Wilderness
Traducido para Rebelión por Germán Leyens
Alocución en Abyssinian Baptist Church [Iglesia Bautista], Harlem,
EE.UU. del 31 de julio de 2003.
[Mientras la credibilidad del gobierno de EE.UU. se pierde hilachas por todos
lados, la ex congresista por Georgia, Cynthia McKinney, que ahora ha sido totalmente
vindicada por sus abiertas preguntas sobre la información del gobierno
respecto al 11-S, hace notar su presencia en todo EE.UU. Ha entablado un proceso
que podría llevar a que vuelva al Congreso con todos sus derechos de
antigüedad y se ha convertido en un recuerdo vivo para los políticos
en todo el país de que hay preguntas que responder y que voces invictas
y dedicadas están ganando fuerza en el campo de batalla político
y no temen exigir que se aclaren todas las responsabilidades.
La verdad nunca desaparece.
En un reciente discurso en Harlem, McKinney presentó algunas observaciones
aleccionadoras y muy directas sobre las relaciones raciales en EE.UU., el 11-S,
las libertades cívicas, los medios independientes, From The Wilderness
y nuestra campaña nacional de anuncios que encuentra una dura, inmoral
e inconstitucional resistencia de algunas publicaciones de importancia que parecen
estar volviendo a elevar la barra que debemos sobrepasar para lograr que publiquen
los anuncios. Para aclarar un punto: Periódicos como The Boston Globe
y The Atlanta Journal Constitution se han negado a publicar el anuncio
después de que los cheques fueron extendidos a la firma de corretaje
y DESPUÉS de que los periódicos lo habían aprobado; ningún
cheque ha sido extendido todavía a The New York Times. El Times
simplemente incumplió una anterior aprobación y acuerdo de
publicar el anuncio. Cada vez que FTW pasa un nuevo test, aparece misteriosamente
uno nuevo. Los poderes que sean temen estos anuncios. Pero no han visto nada
todavía comparado con el precio que tendrán que pagar cuando el
hedor de la censura sea tan ostensible y obvio que la gente se dé cuenta
de que el derecho más precioso de todo estadounidense le ha sido arrebatado.
Una censura semejante no está pasando desapercibida. El derecho de libre
expresión y de igualdad de acceso no es algo que puede ser violado sin
provocar una reacción - (MCR, 5 de agosto de 2003.)]
¡Cuán orgullosa estoy de estar en Abyssinian Baptist Church en Harlem,
EE.UU.!
Gracias, reverendo Butts, Bob, Ruby Dee, Ossie Davis, Sonia Sánchez, Ralph
Carter, Hakim, la Coalición de Artistas y Activistas y a todos los que
han trabajado duro para organizar esta asamblea. Y gracias por invitarme.
Cuán adecuado es que nos reunamos aquí en esta Iglesia, con toda
su rica historia de digna resistencia e indignado desafío ante un orden
social que ha relegado a los gigantes de su día a una ciudadanía
de segunda clase.
Y qué honor para mí, estar aquí entre los gigantes de nuestros
días; aunque sólo sea por un momento y poder ver el paisaje de EE.UU.
en sus miradas.
Lo que esta reunión significa, es que la perspectiva estadounidense ha
sido tan saqueada en sus inmaculadas villas en las laderas de los cerros como
siempre lo ha sido para aquellos de nosotros que nos las arreglamos tras las sombras
de las ciudades.
Nuestra gente está muriendo.
En las calles de EE.UU. nuestra gente está muriendo.
Reunidos esta noche en esta sala hay gente de todos los sectores; y por ese motivo,
es una reunión muy peligrosa para los que están en el poder.
Quisieran vernos divididos.
No lo digo por decirlo. Lo escribieron en sus periódicos de COINTELPRO
[siglas en inglés de Counter-Intelligence Programs, Programas de Contrainteligencia,
operativos secretos del FBI del tiempo de la Guerra Fría, N.d.T.], sobre
cómo mantendrían separados a los negros unos de otros y separados
de los africanos y separados de otra gente de color, y sobre todo, separados de
los activistas blancos progresistas. Escribían lo que desacreditaría
a los activistas negros para que perdieran prestigio dentro de su comunidad y
dentro de nuestra comunidad estadounidense. También escribieron que reemplazarían
a los auténticos líderes negros por lo que ellos llamaban "negros
limpios" que habían preparado para que fueran más leales a ellos
que a nosotros. No son mis palabras, son las de ellos.
Bueno, fueron suficientemente estúpidos para escribirlo y nosotros somos
suficientemente inteligentes como para leerlo. Así que no nos engañaron.
Pero la Coalición de Artistas y Activistas se ha reunido para mostrarnos
que ahora es el momento de actuar. Y recuperar nuestro país.
Yo, por mi parte, puedo decir que estoy cansada de enterrar a negros y latinos
inocentes que mueren a manos de un sistema injusto.
Los neoyorquinos han enterrado a demasiados seres queridos y han derramado demasiadas
lágrimas.
Pero desgraciadamente, cada ciudad importante de EE.UU. puede probablemente presentar
una lista: Ousmane Zongo, Alberta Spruill, Patrick Dorismond, Amadou Diallo; y
son sólo los nombres que conozco.
No tan lejos de aquí, las calles de Benton Harbor, Michigan, estallaron
porque se cansaron de agregar nombres a su lista. No bastó que Terrance
Shurn y Arthur Patterson, jóvenes adultos, estuvieran en la lista, pero
esos nombres sólo estaban sobre los de Eric McGinnis de 16 años
y Trent Patterson de siete.
Leí que la NAACP llamó a mantener la calma y al diálogo.
Lo siento, pero no puedo mantener la calma si van a dispararle a mi bebé
o si algún policía descontrolado lo va a dañar.
No puedo mantener la calma si conduzco por sectores de Atlanta que se parecen
más a Kinshasa, en la República Democrática del Congo, que
a EE.UU.
No puedo mantener la calma.
El diálogo debe ser seguido por una acción rápida y deliberada
para desarraigar por la base el racismo. De una gasolinera en California a una
planta de Lockhheed en Mississippi, de Cincinnati, Ohio, a Benton Harbor, Michigan;
a la ciudad de Nueva York, Nueva York. Y en Belle Glade, Florida, donde encontraron
a un joven negro colgando de un árbol, con sus manos atadas detrás
de su espalda y las autoridades lo llamaron suicidio. En el siglo XXI, los árboles
de EE.UU. siguen teniendo Frutos Extraños.
¿Cuánta injusticia puede absorber alguna comunidad antes de que ocurra
una erupción de extraordinarias proporciones?
Y sí, también tenemos nuestra lista en Georgia.
Y así, colocando tropas en Cincinnati Ohio o en Benton Harbor para restaurar
la calma y "proteger la propiedad" es tan útil para resolver los problemas
de Ohio, o Michigan, o en realidad, América Negra, como colocar tropas
de EE.UU. en Liberia para resolver los problemas o en las costas ricas en petróleo
de África Occidental.
O, también, en las cálidas arenas del desierto de Irak, ricas en
petróleo.
Y mientras el South Bend Tribune vocifera en una página editorial
que los revoltosos de Benton Harbor deben ser responsabilizados, quién
vociferará, si no somos nosotros, que EE.UU. debe ser responsabilizado
por las condiciones enfermizas y envilecidas bajo las cuales viven ahora millones
de nuestro pueblo.
Además, ya que el periódico llamó a "responsabilizar", me
pregunto, ¿hemos visto jamás esa palabra en la prensa corporativa cuando
describen a la Administración Bush? Ahora es un hecho que el Departamento
de Justicia de Ashcroft que dio a los funcionarios del mantenimiento del orden
el derecho de utilizar una orden de allanamiento sin golpear a la puerta, como
la orden que resultó en la muerte de la señora Spruill.
Pero me pregunto ¿dónde están las órdenes de allanamiento
sin previo aviso para el grupo Carlyle, Enron, DynCorp, Halliburton, Worldcom,
HealthSouth, todas las compañías en paraísos fiscales que
huyeron de nuestro país para evitar el pago de impuestos pero que continúan
recibiendo miles de millones de dólares en contratos gubernamentales?
¿Dónde quedaron esas órdenes de registro sin previo aviso?
Y hablando de este tema de la responsabilidad:
George Tener "cayó sobre la espada", como dicen, recientemente y se hizo
responsable por las 16 palabras mentirosas que de alguna manera encontraron un
sitio en el discurso sobre el estado de la Unión de George Bush.
Pero ¿quién en esta administración va a responsabilizarse por los
trágicos eventos del 11 de septiembre y las tremendas fallas de la inteligencia
que costaron las vidas de miles de personas que vivían y trabajaban en
la ciudad de Nueva York?
Es interesante, yo fui la que pidió una investigación del 11 de
septiembre formulando la pregunta totalmente apropiada: ¿Qué sabía
la administración Bush y cuándo lo supo, sobre los trágicos
eventos del 11 de septiembre?
El presidente Bush y el vicepresidente Cheney solicitaron a Tom Daschle que no
investigara lo que anduvo mal el 11 de septiembre. Un periódico australiano
publicó el titular: "Jefes tan relajados, que los agentes creyeron que
eran espías". Estaban describiendo a nuestro FBI.
"Jefes tan relajados, que los agentes creyeron que eran espías."
Hasta hoy no sé de ninguno de los que toman decisiones en toda esta administración
que haya aceptado la responsabilidad por decepcionar al pueblo de EE.UU. En lugar
de hacerlo, esta administración nos ofrece obstrucción, confusión,
ficción y engaño.
Y a pesar de ello, la que hizo su trabajo y le dijo la verdad al pueblo de EE.UU.,
de que nuestra inversión de billones de dólares en las infraestructuras
de defensa e inteligencia de nuestro país no deberían haber fallado
simultáneamente cuatro veces en un solo día y ya que lo hicieron,
merecemos que se nos diga por qué lo hicieron...
Bueno, ésa es la persona que fue relevada.
Mientras tanto, George Bush y Dick Cheney, que siguen en sus puestos, tienen el
descaro de lanzar dos guerras simultáneas, por lo menos una de ellas en
contra del derecho internacional; otorgan contratos sin licitación a sus
amigos en la industria de la defensa, menoscaban nuestra Constitución y
nuestra Declaración de Derechos; ponen a Paul Wolfowitz a cargo de tribunales
militares (la misma parodia de justicia por la que hemos vilipendiado a otros
países en el pasado); ponen a un delincuente, condenado por mentir al Congreso,
a cargo de nuestra privacidad; y mienten sobre el rescate de Jessica Lynch, así
como sobre la llegada del ídolo del aire de EE.UU. - George W.- sobre la
cubierta del Abraham Lincoln, que se supone estaba en alta mar, pero que en realidad
se encontraba en el puerto de San Diego.
Y todo esto ocurre después de que se robaron la presidencia con los recortes
de los votos de los votantes negros y latinos en una estratagema que fue planeada
desde arriba.
Los republicanos recompensaron a Katherine Harris con un puesto en el congreso.
En Georgia, 48.000 republicanos votaron en la primaria de su contrincante, el
Partido Demócrata, por la mujer negra republicana que habían reclutado
para que se presentara en mi Primaria demócrata. Los demócratas
de Georgia y del país no protegieron la integridad de su propia Primaria.
Terry McAuliffe alardea ahora de que hay que proteger a Gray Davis de toda oposición
demócrata en una primaria, pero ¿ dónde estaba cuando debería
haber protegido a esta mujer negra, demócrata leal, contra una conocida
republicana que actuaba por la administración Bush?
Y no basta con que esta administración acepte la responsabilidad por decepcionar
al pueblo de EE.UU. También lo tienen que hacer los medios corporativos.
Incluyendo el New York Times.
Como ustedes saben, estoy involucrada con Mike Ruppert de From the Wilderness
en una campaña nacional que está colocando anuncios contra Bush
en periódicos en todo el país. Por desgracia, muchos periódicos
están rehusando el anuncio pagado o nos están haciendo muchas dificultades
después de haber aceptado el dinero. El New York Times no es ninguna
excepción.
A la cabeza del anuncio hay una caricatura. Muestra a los grandes medios corporativos
"manejados" desde detrás de la cortina por un inmenso Mago. Como el Mago
de Oz. Pero ahí, muy pequeño, al pie de la caricatura, está
Toto, el pequeño perro, abriendo la cortina y denunciando la verdad sobre
los grandes medios corporativos -algo como BAI está haciendo aquí.
Y los medios alternativos lo hacen en todo nuestro país. Bueno, en la caricatura,
Toto representa a los medios alternativos - llevando la verdad a la gente.
El texto menciona el petróleo, el dinero que falta en el Departamento de
Defensa y las cuentas del HUD [siglas en inglés del Departamento de la
Vivienda y del Desarrollo Urbano de EE.UU.], la cláusula de la acusación
contra altos cargos de la Constitución, el proceso que ha sido presentado
contra la votación en la primaria contraria en mi elección y un
mensaje especial de mi parte.
Mi mensaje especial en el anuncio es:
"Cuidado con el País de Oz.. Porque sólo en el país de Oz
es posible que un puñado de hombres vanagloriosos pueda enviar a cientos
de miles de jóvenes soldados a combatir en una guerra ilegal. Y sólo
en el país de Oz puede el Gran Mago socavar los derechos humanos básicos
y llamarlo reforzar la seguridad. ¿Y dónde sino en Oz puede un delincuente,
condenado por mentir en público, ser puesto a cargo del Conocimiento Total
de la Información? 75 millones de estadounidenses no tenían seguro
de salud en 2001 o en 2002. El desempleo está a su más alto nivel
en 8 años. Mientras tanto, en la corte del Mago, hombres de dudosa reputación
se hartan a costa del pueblo. Denuncien al Gran Mago; éste es nuestro EE.UU.,
no Oz."
Ahora, sólo hace unos pocos días, recibí un mensaje a través
de la agencia de anuncios que colocó el anuncio diciendo que, antes de
que The New York Times lo publique, tengo que demostrar que lo que digo
sobre Oz es verdad. ¿Pueden creerlo... The New York Times ahora comprueba
los hechos representados en caricaturas?
¿O se trata sólo de esta caricatura?
No se tomaron la molestia de comprobar los hechos en su artículo sobre
mi persona que está reproducido en el libro de Greg Palast "The Best Democracy
Money Can Buy" [La mejor democracia que se pueda comprar] Sólo publicaron
mentiras a mi respecto en un esfuerzo por asegurar que una republicana negra de
Nueva York que está en contra de la acción afirmativa y contra el
pago de indemnización pueda sentarse en la mesa del Grupo Parlamentario
Negro y representar a Uds. en Washington DC.
En 1776, fue el rey Jorge III el que llevó a los titanes de la colonia
estadounidense a escribir nuestra Declaración de Independencia. Escribieron
que hay ciertos derechos inalienables y que es la responsabilidad del gobierno
proteger, preservar y defenderlos. Sin embargo, en las palabras de sus firmantes:
"cuando una prolongada serie de abusos y usurpaciones... manifiesta una intención
de reducir [a un pueblo a una vida] bajo un despotismo absoluto, es su derecho,
es su deber, quitarse de encima ese gobierno y asegurar nuevas salvaguardias para
su seguridad futura."
Y con eso, una rebelión se convirtió en una revolución.
Mi madre no quería que hiciera este discurso esta noche. Estoy segura de
que es duro para ella leer las terribles cosas que la prensa corporativa y los
activistas derechistas escriben a mi respecto.
En EE.UU. actual, ella tiene razón. Probablemente lo que les he dicho esta
noche me causará problemas. Pero no será la primera vez que tenga
problemas por decir la verdad. Y continuaré diciéndola. Como he
dicho anteriormente, no me voy a sentar y no me voy a callar.
Estoy de acuerdo con Dead Prez. ¡Necesitamos una revolución!
Y tiene que comenzar por nosotros.
Gracias por invitarme a estar con ustedes esta noche.
5 de agosto de 2003