La dictadura monárquica de Marruecos dicta diez penas de muerte a militantes islámicos
Resumen Latinoamericano
El Tribunal de Apelaciones de Casablanca condenó en la noche del viernes a la pena de muerte a diez de los 31 acusados de formar parte de la organización islamista Salafia Yihadia. Entre los condenados a muerte figura Yusef Fikri, acusado de liderar el grupo, aunque la mayor parte de los mismo rechazó los hechos que se les imputan.
Otros ochos procesados fueron condenados a cadena perpetua.
La justicia-farsa marroquí dictó sentencia en la noche del viernes contra las 31 personas acusadas de pertenecer a la organización Salafia Yihadia. El Tribunal de Apelaciones de Casablanca condenó a la pena de muerte a diez de los encausados, a cadena perpetua a ocho procesados, a 20 años de reclusión a siete acusados y a penas de 10 años a otros cinco. Uno de los procesados fue condenado a un año de cárcel.
Entre los condenados a muerte figura Yusef Fikri, que reconoció liderar seis grupos de Salafia Yihadia en diferentes ciudades marroquíes, además de Mohamed Damir, al que el tribunal considera principal colaborador de Fikri.
Los condenados estaban acusados de intentar «desestabilizar Marruecos», además de «asociación de malhechores, homicidio voluntario y posesión ilegal de armas de fuego», entre otros. Sin embargo, la mayor parte de los condenados negó los hechos que se les imputan e incluso afirmaron que desconocían la existencia de Salafia Yihadia hasta ser detenidos en 2002.
Esta organización está acusada de estar tras los atentados suicidas que sacudieron Casablanca en el pasado 16 de mayo.
Entretanto, un tribunal de Rabat condenó ayer a un año de cárcel al director del semanario "Al Usbue", Mustafá Alaui, -la publicación fue cerrada para tres meses-, por publicar una carta de una organización que reivindicaba los atentado de Casablanca.