6 de junio del 2003
El gobierno español aprieta y los sindicatos callan
Piqué anuncia una nueva reforma laboral
IndyACP
El Gobierno está dispuesto a atender las demandas de flexibilidad laboral que reclama el sector de la automoción a través de una nueva reforma laboral, según explicó ayer el ministro de Ciencia y Tecnología, Josep Piqué. Por razones de calendario, las modificaciones no se aplicarán esta legislatura, sino en la próxima, en el caso de que el PP se mantenga en el Gobierno.
Piqué admitió que las multinacionales que fabrican automóviles en España hace tiempo que exigen reformas laborales que permitan ajustar la producción a las oscilaciones de la demanda. Entre otras reformas, las empresas reclaman la supresión del calendario laboral, la eliminación del tope de 80 horas extraordinarias al año y que se pueda mantener a un trabajador con contrato temporal hasta tres años, y no hasta 18 meses, como ahora.
CAMBIOS GENERALES
"Podríamos estudiar una reforma especial para los sectores donde hay grandes variaciones de demanda, como es el caso del textil o de la automoción, pero al final esto no sería posible llevarlo a cabo", dijo el ministro. "Lo lógico es realizar una reforma que afecte a todo el mercado laboral". Los sindicatos exigen que se constituya un foro de negociación, a modo de observatorio, en el que estén representados el Ministerio de Ciencia y Tecnología y los 11 fabricantes de automóviles. Las federaciones metalúrgicas de CCOO y UGT no se niegan a discutir nuevas medidas de flexibilidad laboral siempre y cuando las empresas, en contrapartida, les dejen participar en la gestión de los procesos productivos.
Pero Piqué no se mostró muy optimista sobre la posibilidad de crear este observatorio o foro de discusión porque los fabricantes de coches carecen de una verdadera patronal. Anfac es una asociación sin capacidad de negociación.
Además las casas matrices de cada marca se encuentran fuera de España. Según el ministro, los fabricantes "prefieren seguir pactando individualmente con los sindicatos en cada convenio de empresa y exigir al Gobierno reformas laborales".
EMPRESAS AUXILIARES
El responsable de Ciencia y Tecnología está convencido de que los fabricantes de automóviles no se plantearán más traslados de producción a países de la Europa del Este antes del 2007 porque tienen comprometidas sus inversiones en España, al menos hasta esa fecha. A su juicio, la clave estará en potenciar el sector auxiliar del automóvil para fidelizar a las multinacionales con el país, ya que les será más rentable la proximidad con los fabricantes de componentes. La industria auxiliar ya fabrica el 25% de un automóvil y llegará a aportar el 50% dentro de ocho años. El 35% de un vehículo será material eléctrico y electrónico en el 2010. El sector auxiliar ya controla el 61% del valor añadido de un vehículo. El problema que pronostican los sindicatos es la excesiva presión que realizan los fabricantes sobre sus suministradores para que bajen los precios. Los objetivos de ahorro de los fabricantes se sitúan entre el 3% y el 5% anuales.