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Las fosas comunes de la Guerra Civil han llevado a la Organización de Naciones Unidas (ONU) a incluir a España en la lista de países que tienen desaparecidos. La demanda presentada por la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica, y aceptada parcialmente por la ONU, ha colocado a España junto a países que todavía no han resuelto la mayoría de sus problemas con los desaparecidos forzosos, como Sri Lanka, Guatemala, Irak, El Salvador, Chile, Argelia o Argentina.

Así figura en el informe de 2002 del Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas, dependiente del Alto Comisionado para los Derechos Humanos. Respecto a España, el informe se limita a recordar que, una vez analizada la demanda de la asociación, por primera vez decidió pedir al Gobierno español que investigue dos casos de desaparición. Pero no de la Guerra Civil, sino de la represión franquista, en concreto de la Guardia Civil, en 1947 y 1949, contra la agrupaciones guerrilleras de Levante y Aragón, dos grupos de maquis.

La asociación había presentado 64 casos, casi todos referidos a republicanos asesinados inmediatamente después de la victoria de Franco en la Guerra Civil, pero la ONU decidió aceptar sólo los asuntos ocurridos después de la fundación de este organismo, en 1945. Por eso sólo pudo exigir información de esos dos casos, aunque "sin minimizar" la importancia de los otros 62, una pequeña muestra de los más de 2.000 que la asociación tiene acreditados.

El Gobierno no ha contestado aún a la petición de investigación de la ONU. El año pasado, este grupo de trabajo de la ONU trató 120 casos nuevos, entre ellos cuatro referidos a España. Además de los dos guerrilleros, la ONU investiga el caso de un par de de espías japoneses desaparecidos aparentemente en España e Inglaterra en 1980, después de que los secuestraran agentes secretos de Corea del Norte.