13 de junio del 2003
Bélgica decide que Sharon y otros pueden ser juzgados por las masacres de Sabra y Chatila
Luc Walleyn, Michael Verhaeghe, Chibli Mallat
Traducido para Rebelión por Germán Leyens
Comunicado de prensa de los abogados de los sobrevivientes de las masacres
de Sabra y Chatila, 10 de junio de 2003.
Bruselas y Beirut. El fallo de esta mañana representa una victoria
clara, decisiva, en la batalla legal librada durante los últimos dos
años por los sobrevivientes y víctimas de las masacres en Sabra
y Chatila en 1982.
La Corte de Apelaciones de Bruselas decidió que ninguno de los numerosos
argumentos presentados por el Estado de Israel y por Sharon y Yaron pueden invalidar
u oponerse a una investigación penal, en Bélgica, de las masacres
que tuvieron lugar en Sabra y Chatila hace más de veinte años.
Los enérgicos intentos de nuestros oponentes de invocar la soberanía
estatal, el segundo procesamiento por el mismo delito y otros obstáculos
legales han llegado ahora a un callejón sin salida judicial. Aunque teóricamente
Yaron podría optar por la presentación de una petición
ante la Corte Suprema de Bélgica para apelar contra el fallo de hoy,
es poco probable que lo haga, ya que en realidad abandonó el campo legal
el 27 de mayo, justo antes de una audiencia sobre este caso ante la Corte de
Apelaciones. La capitulación judicial de Yaron, confirmada hoy en la
corte, está en agudo contraste con la posición intransigente de
Sharon y Yaron, que pretendieron en septiembre de 2001 que sus argumentos legales
se impondrían.
Sharon y Yaron han abandonado ahora el terreno judicial, retirándose
por entero a la arena política y diplomática, en la que esperan
que el gobierno belga utilizará la recientemente modificada ley contra
las atrocidades (jurisdicción universal) para enviar el caso a Israel.
La nueva ley permite una tal acción sólo si los querellantes tienen
un acceso imparcial a la justicia en otro país, un argumento impertinente,
en este caso, ya que para comenzar las víctimas y querellantes, siendo
refugiados palestinos, no existen legalmente ante al sistema legal israelí.
Sin embargo, este nuevo mecanismo en sí es disputado con toda razón,
y será seguramente sometido al escrutinio del tribunal constitucional,
ya que viola el principio fundamental de la separación de poderes en
Bélgica, además de los derechos humanos básicos requeridos
por un procedimiento y un juicio imparciales.
En este caso, este hecho resultó obvio cuando el Fiscal Público
en persona solicitó una investigación, el Fiscal General insistió
en que se continuara la investigación durante los dos años de
permanente batalla legal, y la Corte Suprema decidió que la ley contra
crímenes masivos debería aplicarse ahora a los israelíes
acusados. Actualmente tenemos la inequívoca confirmación por la
Corte de Apelación de que, a pesar de las afirmaciones de Sharon y Yaron
de que los nuevos mecanismos de la ley modificada deberían beneficiarlos,
la investigación y un juicio propiamente tal pueden ahora tener lugar.
Para más información vea: http://indictsharon.net/
CONTACT: Laurie King-Irani, Coordinadora Norteamericana, Campaña Internacional
por la Justicia para las Víctimas de Sabra y Chatila, coordinator@indictsharon.net