Rebelión / IndyACP
El estado español entregará a los militares de Colombia ocho aviones militares Mirage F1, fabricados en 1975, helicópteros, lanchas patrulleras, un dragaminas, dos aviones de transporte de tropas Aviocar C-212 y el uso de sus satélites de observación y de comunicaciones.
El anuncio lo hizo el ministro de Defensa español, Federico Trillo. Las aeronaves serán utilizadas "soberanamente" por el gobierno colombiano "para combatir cualquier tipo de fenómeno que afecte a la seguridad de los colombianos". Ese es el compromiso en materia de "cooperación antiterrorista", del estado español con el gobierno de Colombia. Trillo dijo que los aviones de combate Mirage son aviones ligeros que pueden usarse para luchar contra los rebeldes o contra organizaciones paramilitares. Los pilotos colombianos han recibido entrenamiento para manejarlos y mantenerlos, agregó.
Trillo dijo que la cooperación española contra el terrorismo no se detiene ante las siglas de la organizaciones, pues "las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia), ETA o Al Qaeda, aunque no tengan la misma ideología, tienen en común su sustancia principal, que es el matar sin fundamento alguno a víctimas inocentes con medios desproporcionados".
El ministro español de defensa habló durante una rueda de prensa conjunta con su colega colombiana, Marta Lucía Ramírez, al término de su visita oficial de una semana a España.
Ramírez y la embajadora de Colombia en España, Noemí Sanín, expresaron su satisfacción porque el ministro Trillo "ha traducido en hechos la política de cooperación y lucha contra el terrorismo" del presidente del Gobierno español, José María Aznar. Ramírez, por su parte, afirmó que la cooperación española al sector de la defensa colombiana "es un apoyo a la legitimidad del estado de derecho, pues no hay ningún país que tenga estado de derecho si no es con el monopolio del uso de la fuerza en cabeza del estado y de sus fuerzas militares y policiales".
Acerca de los Mirage, Ramírez dijo que servirán para "aumentar la capacidad militar" del Estado y que Colombia pagará por ellos "un precio simbólico". El plan de ayuda española incluye, añadió Trillo, dos aviones de transporte C-212 Aviocar, un dragaminas, que estará disponible en septiembre próximo, una unidad de patrullaje naval y un número aún no determinado de helicópteros de vigilancia. Con respecto a la cooperación militar española en labores de inteligencia e intercambio de información para la lucha contra el terrorismo, Trillo fue enfático al afirmar que ese tipo de "cooperación inteligente" se realiza bajo un compromiso del que no se puede dar explicaciones "por su naturaleza reservada".
Según el ministro español, Colombia podrá utilizar los sistemas españoles de satélites de observación y de comunicaciones "para labores de localizaciones, examen de emplazamientos y tránsitos en tiempo real". Acerca de la formación de cuadros y la capacitación de mandos, Trillo anunció que en marzo próximo viajarán a Colombia el jefe del Estado Mayor del Ejército español de Tierra (comandante general del ejercito), Luis Alejandre Sintes, y el director de Relaciones y Cultura de Defensa, Jorge Hevia, "para intercambiar experiencias con sus pares colombianos".
En su balance de la visita a España, la ministra colombiana aseguró que ha sido un total "éxito" y agradeció el apoyo del Gobierno español a la política de "seguridad democrática" del presidente de Colombia, Alvaro Uribe.
Ramírez añadió que las autoridades españolas proporcionarán a Colombia una serie de equipos de detección y desactivación de explosivos.
Además, dijo que en el acuerdo de cooperación figura la creación en Colombia de un instituto de pensamiento sobre temas de seguridad y defensa, filial del Instituto General Gutiérrez Mellado, que en España auspicia el Ministerio de Defensa. Ambos países desarrollarán además una alianza estratégica entre Industria Militar (Indumil) de Colombia y su similar española "para producir en Colombia, con tecnología española, parte del armamento que necesitamos, como morteros o granadas".
Voceros militares calificaron de "excelente" la noticia. Al tiempo que reconocían "que estos aparatos, fabricados en 1975 por la compañía francesa Dassautl" se mantenían operativos "en la base Gordo de las Islas Canarias, lugar de sus actividades de entrenamiento y reconocimiento".