"El cáncer no me va a matar. Lo único que me puede matar es la tristeza, la tristeza de saber que no podemos llegar a construir esto que tiene que ser una opción de todos los trabajadores".
SE CUMPLEN 10 AÑOS DE LA MUERTE DE GERMAN ABDALA
Por: ANC-UTPBA
El próximo domingo 13 se cumplen 10 años del fallecimiento de Germán Abdala, quien fuera dirigente de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), fundador del Congreso de los Trabajadores Argentinos (CTA), diputado nacional, pero sobre todo, un ejemplo de militancia, de coherencia ideológica y de compromiso con la gente.
'Orgulloso de su origen,"morocho y argentino' -como le gustaba decir-, quiso que todo el mundo supiera lo que fue durante su vida:"un militante popular'. El Turco, el cara de pibe, el hincha de Boca, el dirigente, el militante en la villa, en la calle, en su sector de trabajo, en la fábrica y en su banca de diputado, hasta los últimos días; en las buenas, en las malas y en las del medio', lo recuerda una nota de la última edición de CTA, el periódico de la Central de los Trabajadores Argentinos.
Nacido en Santa Teresita el 12 de febrero de 1955 y radicado en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a los 11 años, Abdala fue un ávido lector de libros de política e historia, pero también de la poesía de Pablo Neruda, Miguel Hernández y Juan Gelman, recuerda su compañera Marcela Bordenave, con quien conformó un hogar con ocho hijos: tres del primer matrimonio de Germán, cuatro de Marcela y uno fruto de la pareja.
En su tránsito por la militancia política conoció a Víctor De Gennaro, uno de sus compañero de ruta para formar la Agrupación Nacional Unidad y Solidaridad de ATE (ANUSATE), con la que el 6 de noviembre de 1984 recuperaría ATE para los trabajadores.
El 14 de noviembre 1992, Germán estuvo en Parque Sarmiento para dar nacimiento al entonces Congreso de los Trabajadores Argentinos, día en que dijo:"El cáncer no me va a matar. Lo único que me puede matar es la tristeza, la tristeza de saber que no podemos llegar a construir esto que tiene que ser una opción de todos los trabajadores".
Diputado nacional por el Partido Justicialista, Germán fue un inclaudicable opositor a la política de privatización y de entrega del gobierno de Carlos Menem, desde el denominado Grupo de los Ocho, bancada de que formó parte al separarse de la oficialista.
Comprometido y solidario, Germán fue un activo participante de todas las luchas emprendidas por la Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires (UTPBA), así como también de las realizadas por otras organizaciones sindicales y sociales.
'El entendía la necesidad de complementar lo político y lo social. Por eso militó tanto en el barrio, en la Villa 21, en el sindicato y en el peronismo desde el Movimiento Revolucionario Peronista (MRP). Si el estuviera, ejercería el papel de síntesis entre lo político y lo social y no tendríamos la fragmentación que hoy observamos en esos campos', recordó Bordenave.