Nubes de tormenta
Pbro. Jose Guillermo Mariani  
www.lacripta.org.ar     
 No se puede negar que "gato escaldado cuando ve la leche huye" y así,  apenas el horizonte empieza a ponerse turbio, los agoreros de desastres  anuncian una pedrea que lo destruirá todo o un huracán que arrasará la  tierra. Y, a veces esos anuncios se cumplen. Y el argumento entonces  parece válido. Pero no siempre. Lo que pasa es que cuando ellos "se tienen  que tragar las predicciones" cuidan muy bien de ocultarse, a la espera la  próxima oportunidad. 
 Cacerolazo por la inseguridad, rumores sobre creación de un cuerpo especial  antipiquetes, procesamiento de una gran cantidad de piqueteros, supresión  de los Planes para Jefes y Jefas, afirmación de la decisión de no volver  atrás de la quita del 75% de la Deuda, apoyo decidido a candidatos a  gobernadores rechazados por la mayoría en sus provincias, apoyo al  interventor del PAMI escudado en su proceder por una versión casi infantil  de secuestro ... 
 Terreno resbaloso en que transita el Gobierno Nacional, que no es sólo una  persona sino todo un equipo. Las audacias personales muchas veces embarran  el campo aunque, por otra parte algunas, como las del ministro Beliz, hacen  aparecer claros algunos objetivos que ya se han cumplido parcialmente y  continúan firmes en la mira. 
 Creo que lo más importante son ahora dos cuestiones. La relación con los  Movimientos sociales cuya expresión más completa , fuerte y variada es el  Piquetero que, si se escapa del método del diálogo, puede resultar muy  problemático. 
 Aquí hay que considerar con objetividad, cuánto puede llegar a preocupar  justamente a un Gobierno, lo que llamaríamos la "ocupación del espacio  público". Éste es un elemento difícil de mantener en equilibrio. Porque  corre peligro de disminuir por una parte, el sentido y prestigio de la  autoridad y, por otra, de inducir a la represión lo cual desataría un  conflicto cruento e inacabable. Los Planes fueron un instrumento  tradicional de la derecha para acallar los reclamos justos, sin producir  ningún cambio sustancial. No pueden mantenerse. Pero hay que dar mayor  impulso al remedio de la desocupación, con el fomento de la Industria  nacional y sin una desmedida expectativa por la radicación de capitales  extranjeros. ¡Nos ha ido siempre tan mal con estas historias que prometen  maravillas, corrompen a funcionarios y publicidad y, una vez instalados,  nadie logra detener su voracidad!  Sólo en la medida en que vaya cediendo el desempleo, se podrán ir  suprimiendo los benditos Planes, que ya han arraigado una especie de  cultura de la desocupación, que no se puede ignorar. 
 El segundo tema es el de la firmeza en los detalles sobre la negociación de  la Deuda. Se trata indudablemente de una "pulseada". Reintegrarse al mundo  por el levantamiento del "cese de pagos" es el gran argumento conservador e  interesado. Allí se le ven fácilmente las "patas a la sota" Romper  definitivamente con el FMI y los organismos internacionales de crédito, es  el reclamo utópico de la izquierda. Hay que admitir un término medio, que  no es mediocridad sino firmeza para determinar un límite que ponga un  antecedente importante en las relaciones futuras. El Empresariado nacional  tiene la gran oportunidad de afirmar la "muñeca" del Gobierno en sus  tratativas con el Fondo. Es explicable que haya muchos que quieran seguir  lucrando con la situación sumisa, limosnera y corrupta. Pero,  afortunadamente, algunos apoyan con decisión.. 
 Un Gobierno solitario será un Gobierno vencido en la pulseada. Un Gobierno  respaldado popular y empresarialmente estará preparado para desafiar las  nubes de tormenta, aun cuando llegue a desatarse el temporal.